Saber tener y saber dar. Poder ser incondicional.

noviembre 27, 2012

Sin título, no me salen las palabras


Darse uno mismo. Brindar a la otra persona lo que apenas tenemos. Ser feliz con la felicidad del otro, y apenas poder contener el llanto al ver el suyo. Tener el alivio de saber que hay un piso sobre el cual caer, y una mano que nos ayude a levantarnos. Percibir en alguien infinidad de cualidades que no pueden ser apreciadas por los demás. Crear con alguien esa conexión que rompe las barreras de lo que sea. Esa conexión que une dos almas. Esa misma conexión que nos lleva a encontrarnos con el otro, con lo más profundo de su ser. Entregarse plenamente a la otra persona. Saber amar al otro.



 “Es muy simple: no se ve bien sino con el corazón. Lo esencial es invisible a los ojos”.
Antoin de Saint-Exupéry